
A CONTRARRESTAR EL ESTRÉS
Hoy en día sabemos que el estrés no respeta las diferencias de sexo, raza, religión e inclusive nacionalidad, porque a todos nos afecta sin distinción alguna. Desafortunadamente, nos pasamos la mayor parte del tiempo preocupados, intentando analizar las situaciones con comprensión y objetividad. De hecho, preocuparnos no cambiará el futuro solo constituye un hábito inútil. En el presente podemos interactuar tanto con el mundo exterior como con nuestro mundo interior. Dar vuel